En este sentido, y asumiendo las imbricaciones e interacciones entre todos los elementos y sus procesos, el Arte natural puede ser clasificado según un punto de vista particular, que sirva como marco operacional del sistema.

Para ello hemos definido dos ámbitos: el ámbito de las configuraciones objetuales posibles, y el ámbito de los procesos naturales que los afectan o que interactúan con ellas y que pueden influir de manera transversal en tales “objetos” naturales.

Al respecto, es necesario puntualizar que al tratarse de configuraciones que reflejan una perspectiva humana de lo natural, no está exenta de influencias sociales, políticas y culturales. La forma en que percibimos y representamos la naturaleza está influida por nuestras propias experiencias, conocimientos, valores y creencias. Esto lleva inevitablemente a una interpretación subjetiva y selectiva de lo que consideramos como arte natural y deja abierta la posibilidad de que sean válidas otras formas de clasificación.

Además, debemos insistir y ser conscientes de que nuestras clasificaciones y categorizaciones pueden simplificar y reducir la complejidad y diversidad de la naturaleza. La naturaleza en sí misma es compleja, dinámica y multifacética, y nuestras perspectivas humanas pueden limitar nuestra comprensión completa de ella.

Por lo tanto, al abordar el arte natural y su clasificación, es importante reconocer su naturaleza humana y subjetiva, y ser conscientes de que nuestras interpretaciones y representaciones son solo una parte de la riqueza y complejidad de lo natural.

Tipos de arte natural: configuraciones objetuales

Hemos identificado siete categorías o configuraciones objetuales en el arte natural. A saber:

Cuerpo o fragmento orgánico
Relicto evolutivo
Cuerpo o fragmento inorgánico
Ecosistema específico
Sector geográfico específico
Fenómeno natural específico
Arte natural efímero

Describamos cada una de ellas.

Cuerpo o fragmento orgánico: Esta clasificación se centra en la presencia de elementos o fragmentos de origen orgánico, como plantas, flores, hojas, ramas, conchas marinas, plumas, entre otros. Se deben considerar los seres vivos de los 7 reinos y/o dominios actualmente vigentes según as últimas taxonomías aceptadas. El autor de la obra de arte, en este caso, se refiere a la especie o grupos de especies que constituyen preeminentemente la obra.

Algunas subcategorías posibles en función de su origen y composición:

      • Cuerpos de seres vivos: Plantas: árboles, arbustos, hierbas; Animales: mamíferos, aves, reptiles, anfibios, peces, insectos
      • Fragmentos o estructuras de seres vivos: Plantas: hojas, ramas, troncos, raíces, flores, frutas, semillas; Animales: plumas, pelos, huesos, conchas, exoesqueletos, dientes; Microorganismos: esporas, células, restos de organismos unicelulares.
      • Materia orgánica en descomposición: hojarasca y restos vegetales en el suelo; carcasas y restos de animales en descomposición; excrementos y desechos orgánicos.
      • Productos naturales de seres vivos: resinas y látex de plantas, miel y cera de abejas, seda de arañas.
      • Tejidos naturales: madera y corteza de árboles, fibras naturales como algodón, lino, lana, seda, yute; piel y cuero de animales.
      • Restos fósiles de seres orgánicos: Fósiles de plantas, animales marinos, dinosaurios, etc.

Relicto evolutivo: Considerando que un ser o grupos de seres son “cuerpos orgánicos”, la separación de esta categoría respecto de la categoría de “Cuerpos o fragmentos orgánicos”, busca valorar aquellos seres con características evolutivas particulares y representan formas de existencia ancestrales o poco modificadas. Un relicto evolutivo se pude encontrar en cualquiera de los reinos de los seres vivos orgánicos. El autor, en este caso, se refiere a la especie o grupos de especies a los que se refiere su condición de relicto.

Algunas subcategorías posibles:

      • Especies relictas: Especies que han sobrevivido como relictos de una época pasada y que se encuentran en un área geográfica restringida. Ejemplos: ginkgo biloba, coelacanto, tuátara.
      • Hábitats relictos: Áreas o ecosistemas que han sobrevivido como relictos en un paisaje que ha experimentado cambios significativos a lo largo del tiempo. Ejemplos: bosques primarios remanentes, humedales antiguos.
      • Características anatómicas o morfológicas relictas: Rasgos o características físicas de organismos que han persistido desde tiempos pasados y que se consideran "fósiles vivientes". Ejemplos: aletas lobuladas en ciertos peces, estructuras primitivas en insectos.
      • Relaciones ecológicas relictas: Interacciones entre organismos que han persistido desde épocas pasadas y que pueden ser consideradas como reliquias evolutivas. Ejemplos: polinización por insectos en plantas, simbiosis específicas.

Cuerpo o fragmento inorgánico: Aquí se hace referencia al uso de fragmentos o elementos de origen inorgánico, como piedras, minerales, rocas, cristales, maderas petrificadas, entre otros. Estos elementos pueden ser identificados por su forma, textura, color o singularidad. Por tratarse de objetos no vivos, el autor natural genérico es la naturaleza.

Algunas subcategorías posibles:

      • Rocas y minerales: Rocas ígneas: granito, basalto, gabro, riolita; Rocas sedimentarias: arenisca, lutita, zeolita, caliza, conglomerado; Rocas metamórficas: esquisto, gneis, pizarra, mármoles; Minerales: cuarzo, feldespato, mica, pirita, calcita.
      • Formaciones geológicas: Cuevas y cavernas, cañones y desfiladeros, acantilados y formaciones rocosas, cascadas y cataratas, arrecifes de coral.
      • Elementos naturales geológicos: arenas y dunas, glaciares y icebergs, volcanes y conos volcánicos, depósitos de sal y salinas, depósitos de piedras preciosas.

Ecosistema específico: Esta clasificación se enfoca en representar o capturar un ecosistema completo como obra de arte. Puede ser un bosque, una pradera, una playa, un arrecife de coral, entre otros. Se busca transmitir la esencia y la belleza de un ecosistema particular y la interacción entre los organismos y su entorno. A pesar de que en los ecosistemas pueden contener seres orgánicos e inorgánicos, la identificación del autor se relativiza según la preeminencia o no preeminencia de especies vivas. En el caso por ejemplo del ecosistema del bosque esclerófilo, el autor o autores deben ser identificados como el propio ecosistema, o en su defecto las especies prominentes en dicha configuración. Distinto sería el caso por ejemplo de “las dunas de Concón”, que al tratarse de un ecosistema cuyo elemento preponderante es un elemento inorgánico no vivo el autor puede ser identificado preferiblemente como el sector geográfico donde se encuentra.

Algunas subcategorías posibles:

      • Ecosistemas terrestres: Bosques tropicales., desiertos, praderas y estepas, tundra, selvas, bosques templados, bosque caducifolio, bosque esclerófilo, manglares.
      • Ecosistemas acuáticos dulces: ríos y arroyos, lagos y lagunas, humedales, pantanos y ciénagas, manantiales y ojos de agua.
      • Ecosistemas marinos costeros: arrecifes de coral, manglares costeros, estuarios, playas y dunas costeras, marismas.
      • Ecosistemas marinos oceánicos: zonas de aguas abiertas, montañas submarinas, fosas oceánicas, plataformas continentales, corrientes marinas.
      • Ecosistemas polares: regiones árticas, regiones antárticas, glaciares y campos de hielo.

Sector geográfico específico: Aquí se hace referencia a la presencia de un lugar o un paisaje específico como obra de arte. Puede ser un monte, una cascada, un valle, una montaña emblemática, un lago, entre otros. El paisaje es un objeto que debe ser localizado geográficamente y logra constituirse en un lugar especial. El autor natural es el lugar, la zona, la localidad el fragmento de territorio que lo alberga.

      • Elementos naturales geográficos: ríos, lagos y lagunas, montañas y cordilleras, valles y llanuras, mesetas y altiplanos, islas y archipiélagos.

Fenómeno natural específico: Esta clasificación se enfoca en identificar un fenómeno natural específico como obra de arte. Puede ser una puesta de sol, un arco iris, una tormenta, una aurora boreal, entre otros. Tratándose de fenómenos recurrentes, se busca identificar la atmósfera, los colores y la energía de ese fenómeno natural en particular. Eventualmente, también pude asimilarse al autor relacionado con el lugar donde se produce el fenómeno, si se considera que ese fenómeno tiene particularidades especiales referidas a un lugar específico. Por ejemplo, las auroras boreales de Finlandia pueden ser únicas en el hemisferio norte. Los arreboles del horizonte de la región del Maule en Chile, que se producen en otoño, pueden ser un fenómeno natural único. Aquí igualmente el autor natural debe ser relacionado al lugar geográfico donde se produce el fenómeno especial.

Es difícil establecer subcategorías para este tipo de arte natural, sin que coincidan con elementos relacionados con los procesos naturales geológicos que se clasifican de una manera diferente en este sistema, sin embargo, intentaremos mencionar algunas posibles subcategorías para que se entienda mejor el sentido de este ítem.

Algunas subcategorías posibles:

      • Fenómenos meteorológicos: arcoíris, arreboles, halo solar y lunar, nubes de formas peculiares (nubes lenticulares, nubes mammatus, etc.), tornados de fuego, vórtices de polvo y arena (remolinos de polvo, tormentas de arena, etc.), rayos globulares.
      • Fenómenos biológicos: migración de animales (aves migratorias, migración de mamíferos, etc.), colonias de insectos (hormigas, termitas, abejas, etc.), fenómenos de bioluminiscencia (organismos marinos bioluminiscentes, hongos luminosos, etc.), floraciones masivas de algas (marea roja, algas luminiscentes, etc.), patrones de vuelo de insectos en enjambres.
      • Fenómenos geológicos e hidrológicos: formación de cuevas y cavernas, geisers, glaciares y icebergs, marejadas y mareas.
      • Fenómenos astronómicos: lluvias de meteoros específicas (como las Leónidas, las Perseidas, etc.), novas y supernovas, fenómenos planetarios excepcionales (alineaciones planetarias, conjunciones, etc.), auroras boreales y australes, fases de la luna, cometas, eclipses.

 

Arte natural efímero: Esta clasificación pone el énfasis en la transitoriedad de obras, que por su composición o formación pueden ser temporales y efímeras en la naturaleza. Sabemos que en todo lo orgánico hay una temporalidad y un ciclo de vida concreto, no obstante, puede haber obras efímeras que tienen corta vida, como la acumulación de hojas en los senderos de un bosque, composiciones de flores caídas, estatuas naturales de hielo, que crean instalaciones o composiciones artísticas que cambian o se desvanecen con el tiempo, debido a la acción de procesos naturales geológicos u otros factores naturales. Aquí se debe utilizar la lógica del autor natural ser vivo preeminente, o en su defecto, el ecosistema que la posibilita y en última instancia el lugar geográfico en el que se produce naturalmente la obra efímera.

Esta clasificación puede identificar y organizar diferentes tipos de arte natural, permitiendo explorar y apreciar la diversidad de expresiones artísticas que ocurren en la naturaleza. El arte natural es una forma de celebrar y honrar la belleza y la conexión entre el ser humano y el mundo natural.

Procesos naturales orgánicos y geológicos

En relación con el arte natural, los procesos naturales operan transversalmente respecto de las configuraciones objetuales, las que pueden ser afectadas por uno o más procesos naturales. Para una mejor identificación y conocimiento de la obra natural es necesario identificar a su vez el o los procesos naturales que las afectan y que le confieren una estética particular.

Procesos naturales asociados a factores inorgánicos y geológicos

En nuestro planeta, existen varios procesos naturales comunes que dan forma al paisaje y tienen un impacto significativo en la configuración de la Tierra. Algunos de los procesos naturales más comunes son:

      • Erosión: Es el desgaste y transporte de materiales de la superficie terrestre por acción del viento, el agua, el hielo y otros factores ambientales. La erosión puede crear características geológicas como cañones, valles, acantilados y deltas.
      • Oxidación: Es un fenómeno que se produce tanto en contextos orgánicos o biológicos como en elementos geológicos o inorgánicos.
      • Sedimentación: Es el depósito de sedimentos transportados por el agua, el viento o el hielo. La sedimentación puede formar playas, dunas, deltas y depósitos de sedimentos en ríos y lagos.
      • Meteorización: Es el proceso de descomposición y desintegración física y química de las rocas y minerales debido a factores ambientales como la temperatura, la humedad, la presión y la acción de organismos vivos.
      • Glaciación: Es el proceso de formación, movimiento y derretimiento de glaciares. La acción glacial puede esculpir valles en forma de U, formar morrenas y depositar sedimentos en forma de tillitas y drumlins.
      • Tectónica de placas: Es el movimiento y la interacción de las placas tectónicas de la litosfera terrestre. Los procesos tectónicos pueden dar lugar a la formación de montañas, volcanes, fallas y fosas oceánicas.
      • Ciclo del agua: Es el proceso de circulación y redistribución del agua en la Tierra a través de la evaporación, condensación, precipitación, escorrentía, infiltración y almacenamiento en océanos, ríos, lagos, glaciares, acuíferos y atmósfera.
      • Actividad volcánica: Es la liberación de material volcánico, como lava, gases y cenizas, desde el interior de la Tierra hacia la superficie. La actividad volcánica puede dar lugar a la formación de volcanes, islas volcánicas, conos de ceniza y flujos de lava.
      • Sucesiones ecológicas: Son los cambios graduales y predecibles en la composición de las comunidades de plantas y animales en un área a lo largo del tiempo. Las sucesiones ecológicas pueden ocurrir después de perturbaciones como incendios forestales, erupciones volcánicas o deslizamientos de tierra.

Estos son solo algunos ejemplos de los procesos naturales más comunes en nuestro planeta. Cada uno de ellos tiene un papel importante en la formación y transformación de la Tierra, y pueden ser elementos que coadyuvan a la configuración de obras de arte natural. Son procesos que pueden afectar de manera transversal a elementos orgánicos e inorgánicos.

Procesos naturales asociados a seres orgánicos.

Los organismos vivos, incluyendo plantas, animales, hongos y microorganismos, interactúan con su entorno y participan en diversos procesos naturales. Algunos ejemplos de procesos naturales asociados a los seres orgánicos son:

      • Fotosíntesis: Las plantas y algunos otros organismos, como las algas, realizan la fotosíntesis, un proceso mediante el cual utilizan la energía del sol para convertir el dióxido de carbono y el agua en glucosa y oxígeno. Este proceso es fundamental para la producción de alimentos y la liberación de oxígeno en la atmósfera.
      • Descomposición: Los microorganismos y ciertos organismos desempeñan un papel vital en el proceso de descomposición de la materia orgánica muerta. A través de la descomposición, los nutrientes contenidos en los restos orgánicos se liberan y se reciclan en el ecosistema, permitiendo el crecimiento de nuevas plantas y la alimentación de otros organismos.
      • Polinización: Los insectos, pájaros y otros animales polinizadores juegan un papel esencial en el transporte del polen de una flor a otra, lo que permite la fertilización y la producción de semillas. Este proceso es crucial para la reproducción de muchas especies de plantas.
      • Ciclos de nutrientes: Los organismos participan en ciclos biogeoquímicos, como el ciclo del carbono, el ciclo del nitrógeno, el ciclo del fósforo y otros, en los cuales los elementos esenciales para la vida se mueven entre los seres vivos, los suelos, el agua y la atmósfera. Estos ciclos aseguran el suministro y la disponibilidad de nutrientes para los organismos.
      • Mutualismo: Existen relaciones mutualistas entre diferentes organismos en los que ambos se benefician. Por ejemplo, la polinización es un ejemplo de mutualismo, donde tanto las plantas como los polinizadores obtienen beneficios.

Estos son ejemplos de procesos naturales asociados a los seres orgánicos. Los organismos vivos desempeñan un papel crucial en los ecosistemas y en la dinámica de la vida en la Tierra. Los procesos biológicos que ocurren en los seres orgánicos interactúan y se entrelazan con los procesos geológicos e inorgánicos para formar el complejo sistema natural en el que vivimos.

 

Catalogación de obras de arte según autoría

Autorías

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